Conforme van pasando los días, hemos visto que cada vez se aumenta más el tiempo que estaremos en casa. Todos sabemos bien que seguir al pie de la letra las recomendaciones de las autoridades expertas en el tema, nos permitirán contribuir a evitar la propagación del coronavirus. Tener claro que acciones tan sencillas pueden generar gran impacto, nos permite que de cierta forma, nos sea más fácil seguir indicaciones. Sin embargo, no hay que olvidar una cadena muy importante: mi mente en paz, mi cuerpo en paz y mi entorno en paz.
Agregar algunas actividades y pensamientos a nuestro día a día, nos ayudará mucho a que las medidas que se están tomando no causen efectos en nuestro bienestar emocional. Es por ello que en este post te daremos algunas ideas de cómo cuidarte mental y emocionalmente para que tu cuerpo este tranquilo, tu hogar este en paz y la relación con tu familia se mantenga en armonía.
1. Ser consciente
Es una palabra que escuchamos y leemos tanto que no le damos la enorme importancia que tiene. En estos tiempos de tanto silencio, de aislamiento y de una convivencia familiar con dinámicas muy distintas, es crucial entender el “ser consciente” como un ejercicio diario de observación:
“Al observarse a sí mismo, uno se percata de que la observación de sí provoca ciertos cambios en nuestros procesos internos. Uno comienza a comprender que la observación de sí es un instrumento de auto-cambio, un medio para el despertar.”
–G. I. Gurdjieff
El que empiezas a ser consciente, cada día, a cada hora, de tus palabras, de tus acciones, de tu entorno y de algo tan sencillo como tu respiración, permitirá que busques priorizar tu bienestar incluso en momentos de ansiedad, volver a ti, te ayudará muchísimo. Claro que esto no será de un día para otro, es un trabajo personal que requiere esfuerzo pero que es muy necesario e importante en estos tiempos.
Ser consciente te permitirá entender el riesgo que correrías tú y los que quieres si no siguen las indicaciones de los expertos, este simple pensamiento, les hará más fácil lidiar con este aislamiento.
2. Infórmate pero con medida
Entendemos la necesidad de mantenernos al día, pero es necesario que limitemos nuestra exposición a los medios de comunicación y sobre todo, a las redes sociales. Infórmense de las fuentes oficiales, Secretaría de Salud, gobierno, comunicados oficiales de la OMS, no recurran a lo que el primo de un amigo me dijo, lo que leí en redes, lo que me dicen las cadenas de WhatsApp, no necesitas esa información ahorita.
Pongan límites en este flujo de información, recuerden que los más peques son aún más sensibles, así que por ellos también observen y decidan bien sobre que información permiten que entre a su hogar y a su mente. Recomendamos que sólo dediquen un par de horas diarias a informarse, no más.
3. Respira
Seguro dirán “¿qué clase de broma es esta?” pero no, en estos tiempos de días con mucha angustia, nerviosismo, enojo, la respiración es nuestra más grande aliada. Esto incluye tomarse unas horas al día para realizar meditaciones, hay muchos tipos de meditaciones totalmente gratuitas en internet que te permitirán relajarte al mismo tiempo que eres consciente de tu respiración. También tomarte momentos al día para ejercitarte si eres de los que extraña sudar en las máquinas, el hecho de que te ejercites en casa hasta morir hace que de la nada, escuches como respiras, inhales y exhales para que te calmes, y créenos, ahí de nuevo, la respiración hace su magia.
Así que este consejo, aunque no lo creas, a veces resulta el más difícil de llevar acabo, vuelvan a ser conscientes de su respiración y permitan que esta los calme.
4. Conservar rutinas
Es chistoso como antes nos quejábamos de ellas y ahora, recurriremos a tenerlas para que estos días nos sean más llevaderos. Conserven sus rutinas diarias como bañarse, arreglarse, preparar los alimentos, trabajar en horarios específicos, ejercitarse, cena en familia, e incluso, fijen sus horarios para irse a dormir. Mantener este tipo de rutinas hace que el día se pase más liviano y le ayudemos a nuestra mente y a nuestro cuerpo a irse acomodando a estas nuevas formas de convivencia.
Recuerda que esto será pasajero, que se vienen días muy buenos y que tu salud mental es sinónimo de bienestar emocional e involucra interacciones humanas de calidad que favorecen condiciones de vida digna y de humanización. Tenemos la oportunidad de crear un mundo más humano.